En primer lugar, un área gris se puede definir como el área donde termina la ley y no está claro que es lo correcto y lo que no lo es. Dicho esto, las áreas grises encontradas en el caso de WorldCom son:
Primera área gris
Una primera área gris la encontramos al comienzo del caso, cuando Bernard Ebber se dio con la sorpresa que su empresa estaba en picada, ya que el sector de telecomunicaciones se encontraba en crisis. Por otra parte, la ley obligaba que estuviera al día en la presentación de estados financieros y, por ende, mantuviera actualizada la situación financiera de la empresa. De ser así, Ebbers sabía que perdería interés por parte de los accionistas, ya que además de haber ido en bajada el precio de sus acciones, los accionistas verían que la empresa tenía pérdidas financieras y ya no más utilidades y, por lo tanto, retirarían el apoyo ofrecido a WorldCom. Asimismo, ello afectaría la estabilidad financiera de Bernard Ebbers, puesto que toda su fortuna personal estaba vinculada con las acciones de la compañía. Ante esta situación Ebbers se encontraba en la situación de ¿qué hacer para salir de esa problemática? Es decir, el área gris era ¿declarar todos esos millones de dólares como inversiones e inflar el valor de la empresa o dejar que la empresa siguiera en picada y cada vez tuviera menos valor como empresa y, por lo tanto, también para los accionistas?
Por todo esto es que, Ebbers decidió que inflar el flujo de efectivo para engañar a los accionistas e inversores y, así, tal vez lograr en un momento poner todo a la normalidad.
ncontramos un área gris porque Sullivan sabía que era lo que estaba dentro y fuera de la ley. Sin embargo, era su jefe el que le estaba ordenando a hacer lo contrario. La persona que le daba trabajo y estabilidad económica le decía que hiciera algo que estaba fuera de la ley. En este caso, Sullivan se encontraba en la enorme disyuntiva de ¿hacer lo correcto y cumplir con la ley o, hacer lo que su jefe y dueño de la empresa donde trabajaba le ordenaba? Como ya se sabe, Sullivan optó por lo segundo e hizo caso a las órdenes de su jefe, Bernard Ebbers.
0 comentarios:
Publicar un comentario